Por asociación directa, ¿cuáles son las primeras imágenes o sensaciones que se te vienen a la mente cuando escuchás la palabra "Temperley"? De alguna manera, me lleva a pensar en mi familia, en los años de mi infancia compartidos con mis seres queridos en el Club. Vengo a Temperley desde que tengo uso de razón y no imagino mi vida de otra manera. Es el más grande de mis sentimientos. ¿Qué recuerdos puntuales tenés de la época de la quiebra? Era adolescente en ese momento, y fue muy brusco quedarse “sin equipo” los fines de semana porque nos quitaba el ritual de ir a alentar a Temperley con la gente de siempre. Una parte importante de nuestra vida se apagó durante ese tiempo, y la verdad es que cuando lo comento con gente de otros equipos no terminan de entender lo que sentimos los “celestes” esos años. No existe un castigo peor que dejar a alguien sin su pasión. Durante muchos años estuviste ligado a la política del Club. ¿Cuál considerás el punto de inflexión para el resurgimiento del Club? Nahuel2 Quizás no está bien que lo diga en estos términos, pero creo que Temperley necesitó tocar fondo nuevamente para poder renovarse. En el momento más crítico del Club –sin contar la quiebra-, se juntaron las agrupaciones para sacar la situación adelante. Para ser sincero nadie soñaba con lograr tantas cosas en tan poco tiempo, fue una suma de voluntades y creo que entre todos nos dimos confianza para volver a soñar en grande. Se aproxima el 1° aniversario del ascenso al Nacional B, en la recordada final con Platense. ¿Cómo viviste esos penales? Uno de las noches más difíciles y felices a la vez de toda mi vida. En lo personal lo viví al lado de mi papá, que es quien me inculcó el amor por Temperley, y cuando Crivelli atajó el último penal nos quedamos ambos sin voz, sólo nos salían lágrimas. En los días sucesivos fuimos “cayendo” de lo que logramos pero no hubo mucho tiempo para celebrar porque nos esperaba un nuevo desafío, con un premio aún mayor. ¿Es posible disfrutar de este momento del Club Temperley en medio tantas presiones? Sí, es posible… Hay que encontrar un momento para todo. A veces pasa todo tan rápido que nos olvidamos que encontramos un equipo casi descendido a la Primera C, con muchos juicios y una crisis institucional muy grande. Hoy estamos disfrutando de jugar contra Boca, contra Racing, ahora se viene River…lo viví de chiquito y volver a sentir eso mismo ahora con esta responsabilidad es un regocijo muy grande. Está comenzando el último año de mandato de la presente Comisión Directiva. ¿Qué balance general se puede hacer? Más allá de lo que uno pueda opinar, me parece que las evidencias están a la vista. Con sólo entrar al Club y ver lo mucho que ha cambiado, con todas las disciplinas desbordadas de chicos. Creo que más allá del crecimiento evidente de Temperley, hay que rescatar el rol social de nuestra institución. Cada chico que hace un deporte en nuestra casa, es un chico que se aleja de la problemática de la calle. Me parece que ese es el principal éxito de nuestra gestión: darle a Temperley un papel importante en la sociedad. ¿Un mensaje para el hincha de Temperley? Sólo tengo palabras de agradecimiento, se han portado de maravillas con nosotros. Cuando asumimos, sabíamos que no teníamos la representatividad que inicialmente puede darte una elección, y en ese sentido fue fundamental que nos den confianza para poder trabajar tranquilos. Hoy los resultados están a la vista y que no tengan ninguna duda que lo mejor está por venir.
  Informe: Federico Benencio Prensa C.A.Temperley